Adolescencia y Rebeldía: Comprendiendo el Torbellino Interno

IR AL TEXTO

La adolescencia a menudo se asocia con rebeldía, pero ¿realmente entendemos lo que ocurre internamente en el psiquismo del adolescente? Este período de la vida se caracteriza por transformaciones profundas y dolorosas. A medida que el adolescente atraviesa la eclosión puberal, abandona su estatus de niño y enfrenta la pérdida de su infancia y de los padres de su niñez. Estos tres duelos —la pérdida de la infancia, del cuerpo infantil y de los padres de la infancia— crean un torbellino interno que se manifiesta en comportamientos externos.

Los adolescentes enfrentan estos cambios simultáneamente, lo cual puede generarles dolor y miedo. Cada uno lucha con su propia realidad psíquica, y la expresión de frases como “ustedes no me entienden, nadie me entiende” es una forma de externalizar las dificultades y el sufrimiento que sienten internamente. Esta rebeldía y aparente incomprensión son reflejos de una batalla interna compleja y dolorosa.

En este contexto, es crucial que los padres mantengan una presencia activa y contenedora. Los adolescentes necesitan límites claros y consistentes. A menudo, los padres, temerosos de confrontar a sus hijos, permiten comportamientos como “regresar a la hora que quieran, hacer lo que quieran y comer lo que quieran”. Sin embargo, este laissez-faire puede dejar al adolescente en una posición vulnerable y perdido entre sus pares, quienes también están lidiando con su propio torbellino interno.

Es fundamental que los padres no teman establecer límites y decir “no”. Esta negativa, aunque puede ser difícil para el adolescente en el momento, es una respuesta estructurante que da sentido a su proceso de desarrollo. Decir “no” puede ser un acto de amor y contención, que aunque puede ser recibido con desagrado temporal, es valioso para el desarrollo emocional del adolescente. Aceptar que el adolescente pueda sentirse frustrado o enojado en el corto plazo, y reconocer que este “no” es una forma de apoyo crucial durante su proceso de crecimiento, es esencial.

El adolescente necesita rebelarse como parte del proceso de dejar atrás la infancia y avanzar hacia la adultez. La presencia y el apoyo de los padres durante este proceso son vitales para ayudar a los adolescentes a navegar estas transiciones con un sentido de seguridad y dirección.

Comparte
MÁS HISTORIAS EXTRAORDINARIAS

Neurodivergencia y crianza desde dentro: cuando padres e hijos navegan juntos la diversidad neurológica

Criar a un hijo neurodivergente es un reto en sí mismo, pero cuando madres y padres también comparten esa neurodivergencia, la experiencia se transforma en algo profundamente singular. Este artículo explora las realidades emocionales, logísticas y sociales que enfrentan estas familias, desmonta los mitos de la crianza perfecta y ofrece herramientas prácticas para construir un modelo de vida sostenible, auténtico y empático. Porque cuando se cuida desde la comprensión mutua, la neurodiversidad deja de ser una carga para convertirse en fortaleza compartida.

Adolescencia y neurodivergencia: acompañar desde la comprensión

La adolescencia es una etapa compleja para cualquier joven, pero para quienes son neurodivergentes puede representar un reto aún mayor. Este artículo ofrece una guía completa para comprender sus emociones, apoyar su identidad y acompañarles desde el respeto, la empatía y la aceptación. Una lectura esencial para familias y educadores comprometidos con una adolescencia más inclusiva.

Neurodivergencia y conciliación familiar: cómo cuidar de tus hijos sin dejar de cuidarte a ti

Criar a un hijo neurodivergente implica asumir una triple jornada: familia, trabajo y la gestión constante de apoyos y desafíos invisibles. Este artículo ofrece una guía práctica para madres y padres que buscan cuidar sin agotarse, con estrategias realistas de autocuidado, conciliación y sostenibilidad emocional. Porque cuidar también significa incluirse en la ecuación.